Ha causado sorpresa como una mendocina puede hablar tan sinceramente y sin tapujos de lo que le sucede, vive y siente.
Tal vez lo hago porque he descubierto, una vez que yo misma lo descubrí, cuanto rollo que las mujeres de mi generación tiene con el sexo.
Para mí, a partir que cumplí 30 fue como un despertar sexual. Antes, en mi matrimonio era como un trámite que me dejaba sabor a poco (luego entendí que sabor a mucho se llama "orgasmo").
No se imaginan el trauma que tenemos con este tema (el del orgasmo), el oral (hacerlo y que te lo hagan), con el "caminito de tierra" (como un compañero de mi trabajo le dice a la cola) que no lo presto, que sí.
Yo, la verdad que me he liberado mucho de todos estos tapujos y estoy en un aprendizaje que me hace bien. El sexo es hermoso, bien disfrutado y compartido, la entrega que se produce en el encuentro hace que llenés de gozo a alguien y ese alguien te haga gozar a vos.
No sé mucho, pero no sé poco y quiero ayudar a través de este espacio a que cada mujer se descubra y viva su sexualidad a pleno.
Y que cada hombre nos conozca un poquito más para que no lo volvamos tan locos.
Nosotras somos así: culto al placer, amor y deseo. Tómenos o déjenos (ojo, no sea que luego nos extrañen).
Besos
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3 comentarios:
No se quein se pueda sorprender de que una mendocina se sincere y hable de si, sin tapujos....
Vuelvo a felicitarte y seguí así.
pitoti2: gracias nuevamente. besos
si, muy cierto, las mujeres somos asi como decis.. Y lo del sexo.. mmmmmm... que tema, la entrega es algo hermoso, màgico... sucede y el mundo entero desaparece. O nosotros nos vamos de èl!!! Quiero irme màs seguido, un beso!
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